En Tíbet, estas pulseras metálicas se conocen como joyas medicinales. Se les otorgan propiedades tales como activar la circulación de la sangre y proporcionar minerales al cuerpo a través de la piel. Se dice que su efecto electromagnético alivia el dolor.

Este brazalete lleva grabado el mantra Om Mani Padme Hum) de los mantras mas elevedados en Tibet; himno a la compasión y al gran respeto de la existencia.

Como la tradición sugiere, las pulseras de cobre ayudan a elevar los niveles de colesterol positivo, así como a conservar la juventud y elasticidad de la piel.

También se les otorga la propiedad de ayuda en la formación y curación de huesos y el alivio del estrés.

Estos bellos brazaletes son ajustables y cómodos, además, su encantador diseño ha sido realizado a mano en Nepal con herramientas y métodos tradicionales que le suman al carácter artístico a esta pieza.

Se cree que utilizar una pulsera tibetana atrae energía positiva, ya que emiten ondas en el entorno que las rodea.