Estas banderas de oración deben sus orígenes tanto a la religión Bon como al dharma del budismo indio. El Budismo fue introducido en el Tíbet por Padmasambhava (800 D.C.). Anteriormente los tibetanos profesaban la religión Bon que era fundamentalmente shamanística.
Las banderas 8 signos auspiciosos; Deben ser colgadas en lugares ventosos por lo que se las suele encontrar en espacios abiertos y en las alturas.
Los símbolos auspiciosos otorgan bienestar y felicidad en el presente y en las próximas vidas. Para el Budismo, representan el buen augurio y suelen estar en los muros de los templos budistas, así como en sus paredes interiores. El buen augurio ocupa un lugar muy importante en la mente de los tibetanos.
En el Budismo estos ocho símbolos no son elementos independientes, sino que cada elemento depende de los demás y se ve influido e influye por el resto de los elementos. Los asta-mangala u ocho símbolos son:
1. El nudo infinito
2. La caracola
3. El parasol
4. La flor de loto
5. Los peces dorados
6. El jarrón precioso
7. La rueda
8. La bandera de la victoria
El sol y la lluvia las van desgastando convirtiéndolas en tiras de colores apagados lo que recuerda que nada es permanente.
Son renovadas nuevamente cada año nuevo tibetano (fines de febrero). Este suceso representa la bienvenida del pueblo al cambio permanente y el reconocimiento de los ciclos de cada cosa dentro del universo.
Los 8 símbolos auspiciosos como los demás símbolos tibetanos tienen distintos niveles de comprensión, varios significados, debido a que están asociados con diferentes cualidades de las enseñanzas de Buda.
El sutra the Heap de la buena fortuna, (Aryamangalakutanama-mahayanasutra), dice, al vestir al Buda:
Veneración a tí cuya cabeza es como un parasol protector,
Con ojos como preciosos peces dorados,
Con cuello como un precioso vaso adornado de la buena fortuna,
Con la palabra como una caracola,
Con una mente infinita de sabiduría como un nudo que nunca acaba,
Con una lengua abierta como un auspicioso loto rosa,
Con un cuerpo que proclama la victoria sobre las afiladas armas de Mara,
Con pies que atraviesan el camino del dharma como una rueda auspiciosa.