El Dr. Willheim Reich describió el Orgón como la energía cósmica que forma parte de toda materia viviente. El nombre proviene de “Organismo y orgasmo”, que hace referencia a la energía vital y en potencia creadora.
Un generador de Orgón o transmutador de energía es una estructura compacta y sólida hecha para estimular las propiedades piezoeléctricas de sus materiales y así atraer, acumular, ordenar y potenciar la energía presente, transformando las ondas electromagnéticas negativas y caóticas en energía vital, armonizada y en perfecta sintonía con la naturaleza, lo que se refleja en efectos biológicos reparadores, es por esto que ha sido utilizado con fines terapéuticos debido a sus beneficios en un amplio rango de aplicaciones.
El Chakra Corazón, Anahata, es un vórtice energético situado en nuestro Corazón. Es el centro de los siete chakras, la unión de lo material y el Espíritu.
Es el centro desde donde actúa el Amor Incondicional. Simboliza el equilibrio perfecto y la conciliación de todos los arquetipos, la abundancia, realización y el éxito en cualquier ámbito de la vida humana.
El Chakra Corazón es tu propio Sol, aquel que disuelve la duda y entra en los rincones más oscuros del Alma para inundarlos de Luz.
El Cuarzo Rosa es una piedra de amor incondicional y paz infinita y es la piedra más importante para el corazón, pues manifiesta la verdadera esencia del amor; purifica y abre el corazón a todos los niveles.
Aporta una comunicación profunda, calma e incrementa la seguridad y confianza en uno mismo.
El Cuarzo Rosa extrae suavemente la energía negativa y la reemplaza por vibraciones de energía más sutil y amorosa, es un excelente transmutador de las emociones no expresadas.
En la salud el Cuarzo Rosa fortalece el corazón físico y el sistema circulatorio, estimula la glándula timo. Ayuda en casos de Alzheimer, enfermedades de Parkinson y demencia senil.
El Cuarzo Blanco, tiene la propiedad de equilibrar y armonizar nuestros cuerpos, sintonizando con nuestras necesidades para sanar, limpiar y ayudarnos a conectar con nuestro propósito espiritual.
También es llamado “La Piedra de Poder” por transmitir, proyectar, canalizar y activar todas las formas energéticas que conocemos; Armonizando y purificando nuestro nivel vibratorio.
Alivia todo tipo de dolores, acelera la cicatrización, revitaliza las células y estimula la formación de colágeno.